Expresidente Alan García se suicida de un tiro en la cabeza
Como lo expusimos en la portada de ayer, AG ya estaba delirando y consumido por los nervios, debido a que por primera vez le llegarían los brazos de la justicia. Y se sucedieron algunas horas para que ocurra el desenlace fatal.
El desayuno de todas las mañanas se vio interrumpido por una noticia impactante que se fue transformando en tragedia, porque primero se trataba de la detención de Alan García, después que era trasladado de emergencia al hospital Casimiro Ulloa y finalmente se supo que se había suicidado.
Había estallado en su interior un aquelarre de vulnerabilidad que lo llevó a su propia ejecución. La bipolaridad de García entró en una pendiente indetenible, que consternó a su familia, amigos y correligionarios.
Se sabe que era efusivo y sufría de depresiones, y que tomaba litio. La decían “Caballo Loco” por sus exabruptos y no se entiende por qué lo dejaron solo, si su rostro reflejaba la angustia y los fantasmas que lo aquejaban.
Además, si tenía ese problema interior, ¿por qué le permitieron tener armas en su casa? ¿Por qué alguien no estuvo cerca de él? ¿Por qué no fue vigilado atentamente?
A medida que se desplegaba el día, la noticia era comentada en panaderías, mercados y otros lugares públicos, donde la muerte de García era la comidilla del día, por la forma en que ocurrió.
HERIDA MORTAL
Al saberse de su muerte, ayer por la mañana, debido a “una hemorragia cerebral masiva por proyectil de arma de fuego y paro cardiorrespiratorio”, según el comunicado del Hospital José Casimiro Ulloa, cundió el dolor en su familia, amigos y correligionarios.
Se supo que estaba a punto de ser detenido por la policía debido a una orden del juez, cuando se disparó sorpresivamente en su habitación, confirmó su secretario personal, Ricardo Pineda.
El Hospital de Emergencias “José Casimiro Ulloa” (HEJCU), a través de un comunicado, informó que el fallecimiento del expresidente de la República Alan García, se produjo “el día de hoy (ayer) a las 10:05 horas”.
“El expresidente ingresó al hospital a las 06:45 horas, con el diagnóstico de impacto de proyectil por arma de fuego, con orificio de entrada y salida en el cráneo. Posteriormente, ingresó a sala de operaciones a las 07:17 horas”, anota el comunicado.
“La Dirección General del Hospital José Casimiro Ulloa expresa sus condolencias a los familiares por este sensible fallecimiento”, finaliza el comunicado del referido hospital.
DESCONCIERTO
Su muerte deja un gran vacío en el Partido Aprista Peruano (PAP). Se espera que haya calma y serenidad. Pero, ¿alguien podrá reemplazarlo? ¿Alguien tomará su liderazgo? ¿Habrá alanismo sin Alan?
Estas preguntas son válidas porque se sabe que García logró lo que Haya de la Torre no consiguió: llegar dos veces a la presidencia de la República, aunque con la crítica retumbaba: “Alan gobierna con sus amigos” y esto generó indignación en el interior del partido, por lo cual muchos se alejaron.
Lo grave es que si no hay una reestructuración a fondo va a perdurar el caos y el desorden; aunque hay quienes sostienen que el suicidio de García refundará al partido y lo hará más unido.
Lo que no se puede aceptar es que dirigentes apristas culpen a la Prensa, a la Fiscalía y al Gobierno de su muerte. Incluso hay quienes han dicho que Gustavo Gorriti y Pedro Cateriano dispararon la bala. Esto no es cierto. Y estas lamentables inexactitudes fueron respaldadas por los parlamentarios de Fuerza Popular Héctor Becerril y Karina Beteta
ALGO MÁS
En la Casa del Pueblo se escuchaba el grito de “el Apra nunca muere”, en medio de las muestras del dolor y después cantaron La Marsellesa en medio de arengas, por la partida de su líder.
FÉLIX GRIJALBA SATO
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